Gracias a que la cultura de la bicicleta hace que las personas sean más conscientes de su entorno y el medio ambiente, el grupo de ciclistas se comprometió a cuidar de la gata. A pesar del mal estado de la gata, la cual no reaccionaba y respiraba con dificultad, la llevaron a una veterinaria donde permaneció hospitalizada un día. La gata logró recuperarse y fue adoptada el viernes 25 de agosto por Adriana (trabajadora de ParqueSoft) y su familia.
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